(Zaragoza, 24 VIII-1498 – Granada, 20-VII-1500). Hijo de Manuel I (1495-1521), rey de Portugal, y de Isabel de Castilla y de Aragón. Su nacimiento venía a cumplir uno de los más anhelados deseos de sus abuelos maternos, los Reyes Católicos, pues el infante englobaba en su persona la posibilidad de unir las coronas de Aragón, Castilla y Portugal, unificando la Península Ibérica en una sola monarquía. La fortuna, sin embargo, no acompañó al niño; el mismo día de su nacimiento murió su madre, dejando profundamente desolado a su padre. Ese mismo año, las Cortes de Zaragoza lo juraban como heredero, con reserva puramente nominal, ya que si nacía otro hijo de los Reyes Católicos, éste sería el heredero y no el infante Miguel. Este niño culminaba la antigua política matrimonial de Juan II de Aragón (1458-1479), que tan bien fue continuada por Fernando el Católico(1474–1516), y permitía que los Reyes Católicos tuviesen esperanzas ante el celo y temor que en ese...