(Guatemala, 14-XI-1817 – Madrid, 28-VIII-1884). Eclesiástico y jurista. Al independizarse Guatemala en 1823, siendo aún niño, regresó a España con su familia. Tras vivir en El Puerto de Santa María (Cádiz) y Valencia, en 1834 se instaló en Madrid, donde cursó estudios de Leyes, obteniendo los grados de licenciado y doctor por la Universidad Central. Nombrado catedrático del notariado, renunció a su carrera profesional para seguir la vocación sacerdotal. Celebró su primera misa el 8-VIII-1849, siendo destinado a Burgos como provisor de la diócesis; al año siguiente fue elegido arcediano de la catedral y en 1853 auditor del tribunal de la Rota. Hombre de confianza del nuncio Barili, el 25-IX-1857 fue preconizado para la sede episcopal de Oviedo, y el 1-X-1863 para la metropolitana de Valladolid. Se opuso con energía al expolio de los bienes eclesiásticos, a la intromisión del poder real en las decisiones de la jerarquía –en 1865, sin esperar el Regium exequatur,...