Cartas escritas por el apóstol San Pablo, de estilo vivo y finamente irónico. Atienden a las diversas circunstancias de la acción apostólica con gran fuerza profética. El esquema general es: presentación solemne, elogio a los destinatarios, cuerpo de la carta, la conclusión y la bendición final. Pueden dividirse en cuatro grupos: Cartas escritas durante su segundo viaje (1 y 2 a los Tesalonicenses). Sus características son la atención a la fe simple, la confianza absoluta de la comunidad y la preocupación dramática por los últimos días. Cartas del tercer viaje (1 y 2 a los Corintios, a los Gálatas y a los Romanos). En ellas aparece el problema de los judaizantes, y Pablo se remonta a la fuente misma de la gracia y al origen del pecado. Analiza la naturaleza de la justificación y el valor de la fe, estudia la impotencia de la Ley y la necesidad de una redención común a todos. Cartas de la cautividad (a los Colosenses, a los Filipenses, a los Efesios...